lunes, 5 de octubre de 2020

El diagnóstico clínico-criminológico del delincuente

Este diagnóstico se refiere al conocimiento del hombre con una conflictiva antisocial, a los procesos físicos, psicológicos y sociales que han conducido al delito. Es un proceso en sí complejo y a la vez dinámico en la que entran todos los elementos para la comprensión del individuo, de su familia y de su medio social. No se refiere únicamente al diagnóstico que se le realiza al individuo cuando ingresa a la prisión, sino que abarca ingreso, estadía (procesado-sentenciado) y el egreso progresivo.

Cada individuo presenta una estructura básica de personalidad que no cambiará y los estudios de diagnóstico se referirán a esa estructura básica. Se debe tener en consideración que los modos y mecanismos que el individuo utiliza en su relación con el medio social, en sus relaciones interpersonales cambian y muchas veces los cambios son sumamente notorios al haber tomado conciencia de sus comportamientos violentos, de su conflictiva existencial, no sólo agresiva hacia los demás sino también autodestructiva.

Se distingue un diagnóstico inicial, un diagnóstico en función de los años de estadía del individuo en prisión y un diagnóstico previo a la salida de la institución penitenciaria, así como un diagnóstico post-institucional.

Desde una criminología clínica e institucional, el diagnóstico comprende:

ESTUDIO DEL DELINCUENTE:

  • Estudio médico: Comprende el examen clínico al interno cuando ingresa a la institución, elaboración de la historia médica, así como brindar asistencia y atención al interno que la necesite. Pone en conocimiento de las autoridades los casos de enfermedades transmisibles que se presenten. Toma en consideración las cicatrices y tatuajes. Señala un diagnóstico médico y da las indicaciones a nivel del tratamiento.

  • Estudio odontológico: Comprende un examen bucal minucioso.

  • Estudio psicológico: Es el estudio de la personalidad del interno, de sus múltiples y complejos aspectos que lo han llevado al delito. En el diagnóstico individual se utilizan generalmente las siguientes técnicas psicológicas: historia clínica, tests proyectivos, tests de personalidad, entrevistas focalizadas y abiertas. Las técnicas deben ser seleccionadas teniendo en cuenta la edad, nivel educacional, nivel socio-cultural, la problemática y conflictiva que presenta, es decir de su sintomatología.

  • Estudio psiquiátrico: Se acentúa la observación en relación a una sintomatología psicopatológica.

  • Estudio pedagógico: Es la exploración pedagógico-cultural que revelará datos del historial escolar y de la actitud previa del alumno frente al maestro y a la escuela, de las relaciones entre alumnos.

  • Estudio laboral: Conocimiento de los antecedentes laborales del interno y de sus intereses y aptitudes para planear el tratamiento como capacitación.

  • Estudio jurídico: Coordina la elaboración de las fichas de identificación y el prontuario criminológico de cada interno. También controla los datos que aportan conocimientos acerca de la evolución y actualidad de la situación jurídica del interno.

  • Estudio sobre seguridad: Es el sector encargado de informar al interno sobre su ubicación dentro de la institución. Proporciona la ropa al interno y lo orienta en cuanto a la asistencia a las diversas áreas o departamentos técnicos. 

  • Estudio sobre actividades artístico – culturales: Conocimiento de las actividades que el individuo realizaba anteriormente de índole artístico – cultural y detección de intereses de aprendizaje en tales áreas para su formación individual.

  • Estudio actividades deportivas: El maestro de deportes  realizará el estudio sobre las actividades deportivas practicadas por el interno y las posibilidades de integración a nuevos grupos o actividades deportivas.

  • Estudio religioso: La actividad religiosa realizada por el interno y su interés en participar de ceremonias, de acuerdo a creencias.

  • Estudio de la familia: El autor del delito como miembro de un grupo familiar y social.

  • Estudio del delito: Los procesos individuales, familiares y sociales que llevan al delito.

  • Estudio victimológico: Relaciones autor-víctima del delito. Familia de la víctima.

ESTUDIO Y ANÁLISIS DEL DELITO: el delincuente proyecta a través del delito sus conflictos ya que esta conducta implica siempre perturbación y ambivalencia. La conducta delictiva posee una finalidad que es indudablemente la de resolver las tensiones producidas. La conducta es siempre respuesta al estímulo configurado por la situación total, como defensa; en el sentido de que protege al organismo de la desorganización, es esencialmente reguladora de tensiones. Toda conducta delictiva es siempre un vínculo, se refiere a otro. 

El delito es una conducta simbólica. Este proceso simbólico se impone más claramente en los crímenes cuyas motivaciones extrañas parecen surgir de mecanismos inconscientes.

Toda conducta delictiva, en el momento que se manifiesta, es la “mejor” conducta en el sentido de que es la más organizada que el individuo puede realizar y es la que intenta regular la tensión que siente y que le resulta intolerable. Es un síntoma, es decir una forma de organizar la experiencia, aunque sea de exponerla a la destrucción. Es como una defensa psicológica que utiliza el sujeto como un medio para no caer en la disgregación de su personalidad.

La conducta delictiva es una conducta concreta del individuo, pero el delincuente en su totalidad es más que ese aspecto porque la conducta delictiva es solamente la expresión de su relación con la víctima en un lugar (espacio) y en una fecha (tiempo) determinados. Revela muchos aspectos acerca del delincuente pero no nos explica por qué ese hombre cometió esa conducta asocial. Para aproximarnos a una comprensión de la conducta delictiva es necesario conocer al individuo, su historia y los rasgos de su personalidad, es decir, todos sus aspectos. Esta conducta es siempre significativa, tiene un sentido cuando la relacionamos con la vida del sujeto en las situaciones concretas en que dicha conducta se manifiesta.

Las preguntas que deben plantearse para un diagnóstico y conocimiento criminológico son:

  • ¿qué ha sucedido?

  • ¿quién es la víctima y quién el autor del delito y sus relaciones? Implica la consideración de los estudios de personalidad, la tarea de elaborar el diagnóstico individual.

  • ¿cuándo? Está referido a la conducta que el individuo ha realizado antes de cometer el delito, es decir a los factores desencadenantes o actuales que actúan sobre la disposición. Existe una interacción entre los factores desencadenantes y la disposición en el sentido de que esta última acentúa, promueve, estructura la actuación de determinadas causas desencadenantes y estas últimas pueden a su vez modificar la disposición.

  • ¿cómo? Nos plantea no sólo las circunstancias del delito, de qué manera procedió en su conducta el autor del delito, sino también el grado de participación en la conducta. Es muy importante para el diagnóstico clínico-criminológico el conocimiento de la participación del individuo en el delito. Si ha sido realizado por varias personas, el grado de participación implica abordar el estudio de la psicología del grupo.

  • ¿dónde? Las circunstancias del delito, vale decir sus accidentes de tiempo, lugar, modo y ocasión constituyen datos sobre la capacidad criminal del individuo.

  • ¿con qué? los medios empleados no se refieren únicamente a las armas utilizadas para cometer el delito sino que hacen referencia a todos los instrumentos subjetivos y objetivos que el individuo utilizó para hacer posible la conducta asocial.

  • ¿por qué? se refiere a los motivos que determinaron al individuo a delinquir y esta pregunta nos enfrenta con uno de los problemas más serios que presenta el estudio de la delincuencia, la crimiogénesis. Toda conducta está sobredeterminada, tiene una policausalidad muy compleja que deriva de distintos contextos o múltiples situaciones en los que se halla todo ser humano. Se debe considerar que las “causas” siempre se refieren a un esquema referencial, a un conjunto “recortado” de relaciones sobre el delito.

Las diferentes conductas delictivas en relación a las características de personalidad permiten un conocimiento del diagnóstico del interno:












CONDUCTA DE HOMICIDIO


























CONDUCTA DE HOMICIDIO

Con alevosía

La víctima no está en condiciones de defenderse, por su personalidad, por las circunstancias de lugar y ubicación de la víctima, por la relación interpersonal de conocimiento del autor-víctima.

Con ensañamiento

Se refiere al modo particularmente sádico con que se realiza el delito. Es una conducta que tiene un proceso deliberadamente cruel para observar el sufrimiento de la víctima.

Por precio o promesa remuneratoria

El individuo realiza el homicidio a cambio de una cantidad de dinero que está previamente estipulada, por lo común desconoce a la víctima y no planea al homicidio sino que se limita a ejecutarlo, lo que revela la índole de su patología.

Por placer

Por el deseo y voluntad del autor, que actúa por un sentimiento de violencia indiscriminado, sin causa y sin relación con la víctima.

Psicótico

Comprende un amplio grupo de conductas motivadas por la desorganización de la personalidad; conductas violentas desencadenadas por procesos esquizofrénicos, psicosis alcohólica, psicosis seniles, psicosis debidas a traumatismos cerebrales. Cuando nos referimos al homicidio psicótico estamos centrando las observaciones en la súbita impulsión homicida como resultado de los delirios o del homicidio sin motivo, sin relación con la víctima. En el inicio de las evoluciones esquizofrénicas existen homicidios particularmente dramáticos y paradójicos que se denominan homicidios inmotivados. El homicidio sustituto, es decir la muerte de una persona (desconocida para el autor) que sustituye al individuo que se pensaba matar.

Dentro del grupo familiar

Las dificultades en la tarea de esclarecimiento del delito deriva que el autor y la víctima pertenecen al mismo grupo familiar.

Por alcoholismo

El alcohol es el desencadenante que actúa como desinhibidor de una conducta violenta, donde subyace una patología paranoide.

Por identificación emocional

El delito está motivado por una conflictiva emocional (celos).

Por envenenamiento

La conducta de envenenar significa para el autor matar encubriendo su acción. Es decir la víctima no advierte el peligro y además el autor desea que se piense que la muerte fue causada por factores naturales.

Para facilitar, consumar u ocultar otro delito

El objetivo criminal, para el autor, es el otro delito; el homicidio es un medio para facilitar, consumar u ocultar su verdadero móvil delictivo.

En estado de emoción violenta

El estado afectivo del autor y de la víctima conlleva a un predominio de conductas impulsivas, irreflexivas, desorganizadas; aunque no es una conducta  fríamente ejecutada, es significativa la tendencia a buscar el enfrentamiento o la relación con la víctima.

Infanticidio

La actitud de rechazo hacia el hijo a través de la conducta violenta. El homicidio revela un estado psíquico gravemente perturbado, motivado por múltiples conflictos, entre ellos el incesto.

Realizado por un grupo

Se distingue: a) homicidio por robo; b) como una conducta de sadismo del grupo hacia la víctima; c) homicidios por venganza entre grupos; d) homicidio realizado por un grupo psicopático identificado y perteneciente a una organización delictiva.



CONDUCTA DE ROBO

Hurto

Sustracción de la propiedad ajena sin violencia ni intimidación. Múltiples categorías que difieren en relación al lugar, modo, objetos sustraídos, víctimas.

Robo

El autor actúa a través de la fuerza en los objetos y medios o también con violencia física en las personas. El ladrón que actúa solo y el ladrón perteneciente a un grupo delictivo configuran generalmente un alto porcentaje de la población penitenciaria.

CONDUCTA DE ESTAFA: el estafador actúa mediante los mecanismos de seducción y engaño


Simple

Es realizada con una víctima al azar, el engaño es simple casi ingenuo.

Compleja

Ligada a una estrecha relación con la víctima, muchas veces significa toda una organización y un determinado tiempo para poder realizarla.







CONDUCTA DELICTIVA SEXUAL

Violación

Relación sexual impuesta y consumada con violencia, en la cual la víctima es forzada a realizarla. Las modalidades de la conducta varían según el agresor, la personalidad de la víctima y las circunstancias.

Incesto

Relación sexual entre parientes consanguíneos: criminológicamente el más conocido (o denunciado) es el incesto padre-hija- este delito está relacionado muchas veces con el infanticidio y la prostitución.

Impudicia con niños

Ataque indecente a niños como consecuencia de tendencias agresivas y patologías sexuales del autor.

Exhibicionista

Es el individuo que obtiene satisfacción exponiendo los genitales. Busca una víctima con determinadas características.

Prostitución

Es una conducta autodestructiva derivada de complejos procesos psicológicos, familiares y sociales.


CONDUCTA DE DROGADICCIÓN

Estupefacientes

Derivados del opio y de la coca.

Psicotrópicos o neurotrópicos

Comprenden psicolépticos, psicoanalépticos y psicodislépticos

Volátiles – inhalables

Pegamentos, solventes y combustibles.

CONDUCTA DE DAÑO

Consiste en destruir, inutilizar o dañar un objeto ajeno. Puede ser dirigida a: bienes de uso público o propiedades particulares.


CRIMINOLOGÍA: ESTUDIO DE LA ESTRUCTURA FAMILIAR

La familia es un grupo que funciona como un sistema de equilibrio inestable o dinámico. Esta estructura familiar, que presenta características propias, contiene una historia familiar única, con un proceso histórico particular y que vive en un marco socio-económico y cultural también determinado contribuye fundamentalmente a la naturaleza de la conducta delictiva realizada por un miembro del grupo familiar.

A lo largo de la vida del niño, tienen influencia decisiva como elementos del medio, los constitutivos del hogar muy particularmente el clima afectivo en que está inmerso, la personalidad de la madre y el carácter de las relaciones con ésta, así como las relaciones entre los padres e hijos y entre los hermanos, las preocupaciones y las relaciones emocionales dominantes. El ambiente material, la situación económica social llega a tener enorme importancia por su repercusión, de ella muchas veces depende el clima psicológico. La insatisfacción de anhelos y necesidades elementales ocasiona fatalmente variaciones del humor, angustia y rozamientos de grave influencia sobre la vida emocional del niño.

Psicológicamente el individuo pertenece a todos aquellos grupos con los que comparte el mismo tipo de conducta. Así el individuo crece como miembro de cierto grupo nacional, con sus tradiciones propias y su fondo cultural. El individuo nace en el seno de una amplia división cultural con sus características. Por lo tanto desarrollará ciertas aptitudes, rasgos emocionales, actitudes y creencias como resultado de su pertenencia a ese grupo. Al individuo se lo puede considerar, en parte, como resultante de su pertenencia a muchos grupos. La individualidad de cada persona en función del fondo de experiencia que comparte se explicaría, por la multiplicidad de grupos que se superponen y con los que el individuo puede identificarse desde el punto de vista de la conducta. Es necesario, entonces, considerar la influencia del hogar, las relaciones con los padres, el clima afectivo, el ambiente materia, la situación económico-social de cada delincuente.

FAMILIA Y DELINCUENCIA

Familia desintegrada 🡪 es donde se observa más claramente la etiología del delito. Son familias desintegradas por múltiples causas: muerte de uno de los padres, separaciones, abandono del hogar, encarcelamiento del padre, hogar nunca establecido, etc. el niño crece en un ambiente contradictorio que lo conduce a la marginación, a la desconfianza y a la violencia.

Familia integrada 🡪 están todos los miembros importantes del núcleo familiar pero el niño crece en un ambiente con carencias afectivas, la familia se siente indiferente ante el niño o por el contrario lo sobreprotege.

Teniendo en consideración el delito podemos referirnos a diferentes tipos de familias:






Familia del delincuente por robo

El individuo que ha cometido un robo es una persona con una marcada inestabilidad en todas sus conductas, que proyecta una personalidad con una grave conflictiva interna que se traduce especialmente en la relación interpersonal agresiva y autodestructiva. A la edad de 10 años ya manifiesta sus conductas antisociales, presentando una historia familiar inestable. Su historia infantil y familiar es regularmente traumática, se descubren repetidos rechazos, castigos frecuentes y privaciones reales. Ha transcurrido importantes períodos de la infancia en instituciones de menores o a cargo de diferentes padres adoptivos lo cual  ha sido un obstáculo para lograr identificaciones positivas y perdurables. Generalmente la familia está desorganizada y ha sido la causa principal de que el niño haya abandonado el hogar. La familia se caracteriza por la inestabilidad, frialdad, falta de cuidados y protección al niño; no colabora en el tratamiento penitenciario ni ayuda al interno.






Familia del delincuente sexual

En casi todos los casos se advierte de qué manera en la historia del sujeto existía la conflictiva sexual mucho tiempo antes de que la desencadenara. La personalidad del delincuente sexual se caracteriza por una acentuada inmadurez emocional, teniendo un desequilibrio afectivo que se proyecta en las conductas repetitivas. La inseguridad básica que presenta hace que su comportamiento sea tímido, retraído, inhibido, el resulta paradojal con el ataque sexual. La historia de la familia del delincuente sexual muestra un hogar desintegrado, falta de supervisión, carencia de afecto y cuidado, rodeado durante la infancia de condiciones poco favorables. A consecuencia de las condiciones soportadas durante la infancia, el individuo se sentía confundido y en una conflictiva en el área de la sexualidad. En el delincuente sexual se observa la consecuencia de la negación de dos necesidades fundamentales: seguridad y afecto. Exterioriza hostilidad y resentimiento frente a la autoridad porque ha sufrido carencias emocionales, ha sido afectado por la conducta de uno o de ambos padres, de características sádicas y dominantes. Ante el delito sexual la actitud de la familia es de rechazo, de distanciamiento.




Familia del delincuente por homicidio

El homicidio está relacionado a procesos individuales de desinhibición y fallas en los mecanismos de defensa. La observación más minuciosa de sus historias revela que este individuo tuvo numerosas dificultades en su vida de relación, una historia de frustraciones a sus necesidades, acumulación de tensiones como consecuencia de una agresividad reprimida. En la historia clínica se observan deprivaciones internas y externas, alto alcoholismo, deterioro, pero el individuo permanece integrado a la familia. la familia se muestra pasiva y observadora ante la desorganización psíquica del individuo. La conducta homicida es generalmente impulsiva y no planificada. La familia lo asiste dentro de la institución penitenciaria así como lo ayuda en la reintegración social.






Familia del delincuente estafador

El estafador necesita satisfacer fantasías de grandeza actuando y tratando de demostrar su concordancia con el ideal del yo. Asume identidades de otros para poder concretar su fantasía. Realiza esa conducta debido a que su propio yo es desvalorizado y por eso elige y usurpa el nombre de otro (real o imaginario) quien cumple los requisitos de su propio ideal. No puede soportar la tensión ni la frustración. Crea situaciones en que todos lo quieren y confían en él; engaña precisamente a quienes agradó y busca inconscientemente el castigo. Cuando era niño tuvo la capacidad de asimilar la decepción de su megalomanía por una real o fantaseada carencia de amor. Cuando ha logrado la prueba de que todos los demás lo aman, eso mismo pierde interés y la búsqueda narcisista recomienza. El estafador proviene de una familia de estatus socio-económico y cultural medio, el núcleo familiar primario presenta irregularidades.






Familia del drogadicto

Es un individuo que tiene una acentuada inestabilidad familiar, laboral, educacional. La conducta del drogadicto es rebeldía frente a normas y patrones sociales. Manifiesta una definida oposición a la familia. El comportamiento inestable, inseguro y en una búsqueda de dependencia que se traduce por la drogadicción debe explicarse por la estructura familiar ya que proviene de una familia autoritaria con un padre rígido y exigente. El drogadicto es una persona inmadura, infantil, con sentimientos de omnipotencia, evasivo y dependiente. La conducta del drogadicto puede considerarse una conducta autodestructiva relacionada a su familia, ya que él es depositario de las tensiones y agresiones del intragrupo familiar. A través de la drogadicción niega el mundo real, a su familia y se refugia en un mundo mágico.



El delito dentro del grupo familiar

Entre las conductas más frecuentes que se realizan dentro del grupo familiar podemos mencionar: incesto, homicidio, robo y daño. En estos casos se hace indispensable el estudio del delincuente y de la víctima como emergentes de un grupo familiar con características determinadas. Y el estudio de este grupo familiar como un medio para la comprensión de los procesos que llevaron al delito. Bowlby señala que el origen de las perturbaciones psíquicas y sociales está en la privación familiar, es decir en las carencias de lazos y relaciones afectivas.


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