miércoles, 22 de septiembre de 2021

La conducta problemática y su abordaje desde la terapia cognitivo conductual

 Conducta problemática reemplaza a los términos tales como conductas disruptivas, conductas desajustadas, conductas inadecuadas, perturbadoras,

Razones para el cambio 

Las conductas problemáticas generalmente son adaptativas, suelen servir a una función para la persona que las desempeña, y por eso son tan estables y frecuentes. Es decir, tienen un aspecto funcional.

Las conductas problemáticas suponen un problema que los profesionales deben resolver, un problema entre un contexto y la forma que un sujeto responde a él, lo que implica un sobreesfuerzo del sistema de apoyo.

Conducta problemática 

Aquellas conductas que por su intensidad, duración o frecuencia afectan negativamente el desarrollo personal del individuo, así como a sus oportunidades de participación en la comunidad 

Generalmente tienen una función para la persona que las desempeña.  Exigen un sobreesfuerzo del sistema de apoyos para atender adecuadamente las necesidades del individuo. El problema no es en exclusiva de la persona que se comporta de una determinada manera, sino que también tiene que ver con cómo los demás perciben, toleran o tratan dicha conducta y, por tanto, el cambio no ha de ser solo de la persona, sino también del sistema de prestación de apoyos 

La conducta problemática Puede variar tanto en su forma o topografía como en su intensidad.  Ej: autoagresiones, agresiones,  destrucción de objetos,  autoestimulaciones, negativismo, etc. Enormemente frecuentes, que causan mucho o poco daño.

Características de la conducta problemática (Emerson, 1998)

 La conducta problemática se define por el impacto que ésta tiene en la persona o en su entorno.

 La conducta problemática se define socialmente.

 De la conducta problemática se derivan unas consecuencias personales y sociales que pueden ser tanto inmediatas como a largo plazo.

Consecuencias de la conducta problemática 

- Consecuencias personales inmediatas o directas, ej: autoagresiones.

- Mayor probabilidad de hospitalización. 

- La Conducta Problemática predice el riesgo de maltrato.

- Demanda excesiva de la medicación.

- Utilización incontrolada, incorrecta o abusiva de sistemas de sujeción personal o mecánica.

- Deprivación social.

- Apatía en el trato, desanimo  x sensación de fracaso reiterado en el intento de controlar o eliminar de modo permanente esos comportamientos.

Recursos apropiados para atender la conducta problemática 

Valores que sustentan las actividades de apoyo

 Proporcionar apoyos dirigidos a que las personas con discapacidad logren satisfacción y bienestar.

Asumir que estas personas pueden participar y aportar cosas valiosas a la comunidad, desarrollar sus capacidades y tener aspiraciones, deseos y necesidades de relaciones interpersonales comparables a las del resto de los ciudadanos.

Facilitar y promover la participación de las personas atendidas y de sus familias en los procesos de toma de decisiones que afectan a los servicios que se les prestan.

Reconocemos que el éxito en los programas de atención depende necesariamente de la participación de todos mediante el trabajo en equipo.

🠋Equipos de trabajo

🠋Problemas de motivación.

🠋Falsas expectativas

🠋Programas que se imponen a personas.

🠋Modelo basado en la rehabilitación como fin.

🠋Objetivos desde el individuo 

🠋Desde el conocimiento de sus necesidades, capacidades y deseos 

🠋Prestación de apoyos.

🠋Modelo basado en la participación en la comunidad.

Programas implican una alianza entre el personal de apoyo y la propia persona que precisa apoyos 


Posible respuesta desde el nuevo enfoque: Grupo de apoyo conductual positivo 

El Apoyo conductual positivo es un enfoque para hacer frente a los problemas de conducta que implica remediar condiciones ambientales y/o déficits en habilidades. Consiste en desarrollar y establecer apoyos, con el fin de conseguir cambios conductuales importantes a nivel social, utilizando estrategias lo menos aversivas posibles para la persona.

Ofrece los apoyos necesarios a nivel conductual, plasmados en un plan elaborado por el equipo de atención directa, familiares, amigos y allegados.

Es un planteamiento basado en el respeto de los valores de la persona y en la derivación eficaz de hipótesis funcionales sobre el comportamiento problemático.

El Apoyo conductual positivo centra la atención en crear y apoyar contextos que incrementen la calidad de vida (desarrollo personal, salud, social, familiar, trabajo, ocio y tiempo libre, etc.), haciendo que las conductas problemáticas para aquellas personas que las presentan sean menos eficaces, eficientes y relevantes y que las conductas alternativas sean más funcionales.

Un resultado exitoso es definido en términos de cambios en el estilo de vida que permiten a la persona con discapacidad volver a participar en actividades de la comunidad de las cuales fue anteriormente excluida o a las que nunca tuvo acceso y no por la eliminación de la conducta problemática per se.

Características del apoyo conductual positivo 

  • Está basado en la evaluación funcional, vinculando variables ambientales con las hipótesis relativas a la función de la conducta problemática.

  • Es global e incluye intervenciones múltiples.

  • Trata de enseñar habilidades alternativas y de adaptar el ambiente.

  • Refleja los valores de la persona, respeta su dignidad y sus preferencias, y trata de mejorar su estilo de vida.

  • Se diseña para ser aplicado en contextos de la vida diaria, haciendo uso de los recursos disponibles y basándose en una visión compartida del problema.

  • Mide el éxito de los programas por el incremento en la frecuencia de la conducta alternativa, el descenso de frecuencia de la conducta problemática y por mejoras en la calidad de vida de la persona.

Principios del apoyo conductual positivo 

  • La conducta problemática tiene una función para la persona.

  • La conducta problemática está relacionada con el contexto.

  • Una intervención eficaz está basada en la comprensión de la persona, su conducta y contexto social.

  • El plan de apoyo debe tener en cuenta los valores de la persona, respetar a su dignidad, y aceptar sus preferencias y aspiraciones.

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