El amor, una invención feliz y necesaria para la salud psíquica

Gustavo Dessal dijo que "El amor es una invención feliz que nos permite soportar la existencia"

Cuando nos enamoramos tomamos a ese persona especial y la envolvemos y tomamos por ese otro que llevamos en nuestros ideales, en nuestra imagen más narcisista, o en ese otro materno o paterno de nuestra infancia que idealizamos. Víctor Korman, en El oficio de analista, nos dice que "Todos los amores tienen un carácter narcisista y en ellos siempre se toma al otro por otro"

El amor para el psicoanálisis, aunque sea un terreno abonado con el autoengaño, la proyección ilusoria de los ideales, donde el narcisismo se vuelca en el otro como si se tratara de un espejo, también es un fenómeno necesario y fundamental para la salud psíquica.

El mismo Freud ya resalta el poder del amor, cuando se atreve a ser vivido y no se reprime, para curar cualquier neurosis y define la terapia psicoanalítica como "una cura a través del amor".

Lacan dice que "sólo el amor permite condescender el goce al deseo". Es decir, que la satisfacción autista del síntoma puede volcarse hacia fuera gracias al amor, lo cual es una manera más sana y productiva de vivir.

Ay el amor... esa ilusión tan necesaria para soportar el dolor de existir y que planta frente, con su difícil y trágica dignidad, a la Muerte.