jueves, 6 de marzo de 2025

La formación del analista: un saber hacer más allá de la técnica

La formación psicoanalítica no se reduce al aprendizaje de una técnica estándar o protocolizada aplicable en todos los casos. Más bien, se trata de un proceso de trabajo que implica una forma particular de hacer, donde la transmisión del saber no ocurre como una simple acumulación de conocimientos teóricos.

No se trata de un saber meramente intelectual o especulativo, sino de la construcción de un saber hacer. Freud ya señalaba que, aunque el psicoanálisis tiene reglas claras para sus inicios y finales, lo que ocurre en el transcurso del proceso está atravesado por la contingencia. Es precisamente esta contingencia la que permite que el psicoanálisis se practique sin estar sujeto a un modelo rígido.

En este sentido, la formación del analista se estructura en torno a su propio análisis, la supervisión de casos, el estudio teórico y los intercambios con otros colegas. A esto se suma un aspecto fundamental: la escritura como herramienta de elaboración y transmisión.

Este proceso formativo no solo implica estudio y lectura, sino también la capacidad de reformular, interrogar y combinar los conocimientos adquiridos de manera singular. La clave no está en la mera repetición de conceptos, sino en la producción de un pensamiento propio a partir de la experiencia analítica.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario