jueves, 3 de octubre de 2024

¿Por qué "la prudencia" transferencial?

Podemos sostener que entre "La angustia y "Los cuatro conceptos..." asistimos a una serie de reformulaciones en cuanto al estatuto freudiano de algunos conceptos. Es el caso de la angustia, por ejemplo, respecto de la cual se interroga acerca de si debe ser reducida a una señal en el yo; también es lo que se pregunta acerca del complejo de castración, en el sentido de si debe quedar acotado a la definición de la castración como deuda simbólica.

Entre el final del seminario 10 y el principio del 11 encontramos ya inflexiones, a más de la angustia señal nos la vemos con el concepto de la angustia; en cuanto al Icc se hace posible separar al freudiano, del que se desprende de ese planteo de Lacan por lo cual un real, vía la pulsión, empalma con el Inconsciente.

Entendemos que en consonancia con este trazado puede reformular el campo de la transferencia comenzado por preguntarse cuál es su "concepto", lo que nos retrotrae al planteo sobre la angustia. ¿La transferencia se reduce al amor?, ciertamente no.

Se emplaza más allá ese sentido complejo de la misma, que es la transferencia negativa, de la cual señala que los analistas andan con más "prudencia", ¿es una descripción o una crítica? Y todavía, además, está ese campo de lo que Freud denominó neurosis de transferencia.

Ahora bien, todos estos sentidos no hacen más que constituir el carácter "semántico" de la transferencia, lo cual pondrá en tensión con la transferencia real que comienza a elaborar, la cual es de una consistencia indiscutible con el Icc lacaniano, aquel que da el puntapié inicial del camino que lo lleva a forjar el concepto del Inconsciente real.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario